Hay personas que, por más que quieren disimular lo que son, sus gestos, andanzas o lo que cargan encima, los delatan, pero por la milla. He aquí algunos ejemplos:
El cuello lleno de cadenas, prendas por todas partes y los cabellos moja’o: (Domican-York).
Una chacabana que ya se ve marrón de curtía, una pancita bien pronunciada y un puñal en el cinto: (Alcalde pedáneo).
Un moreno con trenzas, prendas, gafas y que hable inglés: (Sanky- Panky).
Un señor con un olor a peje, una vara y varias lombrices en un potecito: (Pescador).
Unas boinas, zapatos de colores, breteles y atuendos raros: (Un sonero).
Camisa negra, corbata blanca, un bulto tipo maletín y un Paper Mate en el bolsillo: (Alguacil).
Botas de gomas, lanilla, unos bolos y una gorrita: (Lavador de autos).
Un termo de café, un radito de pila, unas gafas negras y una escopeta 12: (‘Guachimán’).
Olor a sudor encendí’o, barriga bien grande, voz de trueno y la boca embarrá’ de fritura: (Patanista o camionero).
Un listado de teléfonos, un tarifario de precios y las tarjetitas de varios bufetes de abogados: (Corredor de casas).
Una pelá’ de gallina cocola, una cachucha de la’o, pantalones por la rodilla y un poloché’ oliendo a pluma de pollo moja’o: (Un Jou).
Un casco entre los brazos, los labios cenizos, quema’ito del sol y guaya’o por toa’ parte: (Motoconchista).
La cara como un block, 6 pies de estatura, estilo de guardia y odiosísimo: (Seguridad o guardaespaldas).
Un tipo gordo, simpático y glotón: (Chef de cocina).