Escrito por: Wilson Díaz
Nuestros políticos, primero meten la mano, y luego sacan los pies.
Debido a su volumen, hay estómagos, que hacen mala barriga.
Luego de buscar el éxito, Robertico ha llevado una vida, de película.
Nuestro país está lleno de italianos que han metido la pasta.
A las mujeres que privan en bizcochitos, lo que no se les va en llantos, se les va en suspiros.
El que inventó el calendario hizo su agosto.
A los peledeístas, por construir tantas avenidas, no habrá quién los calle.
Decir que todos los cantantes urbanos desafinan es exagerar la nota.
Tantos abortos no los concibo.
Castigar la negligencia médica sería muy saludable.
Para algunos políticos, tener la conciencia limpia, es síntoma de mala memoria.
El riñón que esté libre de cálculos, que tire la primera piedra.
Para muchos agricultores, la calidad de nuestro abono está en el suelo.
El ver tanta basura acumulada me deja deshecho.
Si mi dinero está en un banco es porque lo siento.
Según los perredeístas, el Cibao era de Peña Gómez, y Santo Domingo de Guzmán
Por una buena taza de café cualquiera se cuela.