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Desbacho de prensa

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Primer bloque
Hacia una antología de la corrupción

Es punto de partida de este artículo que pasarán prolongadas  décadas de repercusión en la sociedad dominicana de los daños físicos morales e intangibles ocasionados por los gobiernos morados.

Quien no entendía ese presagio, pudo captarlo con algunas de las lecturas de lo que fue la marcha contra la impunidad el 22 de enero.

Por supuesto, la corrupción morada en ciertos aspectos fue la herencia de mismo fenómeno expresada en épocas pasadas con otros perfiles y apellidos.

La marcha del 22 de enero fue un excelente inicio de masas a lo que se debe definir como el inicio del fin de la pesadilla morada.

Quien escribe lo afirma porque vivió una experiencia inédita con la convicción de que solo educando a las nuevas generaciones se marca el colapso de la impunidad, sin necesidad de apelar a siglas internacionales como la ONU y la OEA que es el interés de  algunos.

La presencia en todo el trayecto de la marcha de Felipe Polanco simboliza que él es un ciudadano, en nada ajeno a ninguna expresión de la ciudadanía.

Y como Felipe, todos los humoristas-ciudadanos debieron ser rociados por lo que llaman sensibilidad ciudadana.

Es que el humor no dista del sentimiento. Todo lo contrario. Y por eso, inevitablemente, el sentimiento ciudadano entraña presencia en los medios  humorísticos.

¿Qué dominicano puede obviar, en serio o en broma, el tema Odebrecht, y el extendido tema de la corrupción?

Entonces, la comunicación vía los medios va de la mano con el humor.

Veamos ahora algunos símbolos de la corrupción.

OISOE: sigla de una entidad con extendido rastro de corrupción, en la que se mueven por sus anchas individuos con padrinos morados que ensamblaron una plataforma, llamada «mafia siciliana» para prestar dinero con intereses usureros, con articulaciones de chantajistas que acorralan bajo presión a sus víctimas, sin cesar, orientados a que la víctima acepte préstamos condicionados a nuevas tenazas que lo desesperan. Tal fue el caso del Arq. David Rodríguez, quien optó por el suicidio. Su caso es y será una denuncia permanente de la corrupción.

ODEBRECH: La típica mafia que ha embarrado a múltiples de núcleos dentro del más variado tinglado de actores y resortes de todo tipo, como los vinculados a los tentáculos. El emporio de capital brasileño ha contado con todas las atenciones y privilegios de un ministerio público tornado en misterio público para engañar a los dominicanos. Mientras internacionalmente ODEBRECH se desploma como entidad mafiosa en República Dominicana es protegida como secretos de Estado y atenciones de protección exclusivas.

BIBLIOTECA NACIONAL: edificio que no debe confundirse con los centenares de libros que allí se techan, ni con los servidores públicos que trabajan bajo miserables sueldos que no les alcanzan para una vida digna. En el momento del destape, la edificación fue objeto de múltiples denuncias de corrupción, en el sentido de que fue sobrevaluada múltiples veces el costo proyectado.

Faltan múltiples tentáculos gubernamentales que han de figurar en la antología de la corrupción y que marcan un antes y después en la República Dominicana.