Escrito por: Cuento popular
«Para que tú me oigas, mis
palabras se adelgazan a
veces…» Pablo Neruda
Pues pa que me oigas a mí
tengo palabra adobada
llenas de carne salada
de chenchén y de mabí,
tiene mi verbo zahorí
todo el jamón y el chorizo
preparados en un guiso
con mucho salero y ají,
tiene platos valencianos,
está repleto de viandas
tiene los quesos de Holanda
y las pastas de Milano,
tiene pulpo a la gallega
y algún filete miñón,
de Valencia la paella
y del puerco el zancarrón;
lleva consigo el aroma
de la morcilla de Burgos
y lleva un cocido kurdo
y algún queso de la loma,
y lleva un montón de sales
de las mareas detenidas
y se siente bendecida
con el queso de cabrales,
lleva el picante en tamales
y el morito de gandules
y lleva los quesos azules
y para colmo de males;
lleva un puerco asao entero
y de un chivo alguna banda
lleva algún cerón de vianda,
una cazuela de mero,
unos trocitos de pollo,
de harina de trigo un bollo
y un pedazo de ternero
y pa evitar jervedero,
pongo a mi verbo potasio,
mis palabras para hablarte
no tienen que adelgazarse
Ni necesitan gimnasio.
