Lenguaje gráfico: Cristian Hernández
|
FC: Sin ser muy exagerado: ojalá yo que mi trabajo se concentrara específicamente en la labor social. Yo pienso que la gente critica en todas partes, pero nosotros: ¿qué estamos haciendo?, ¿cuál es el legado de nosotros? Aunque se oiga «cursi»: nosotros tenemos que despertar a la gente; y creo que viralmente sería maravilloso que se contagiara todo el mundo en ese tipo de cosas, y ha pasado. Cuando creamos [la Fundación] Caminantes por la Vida, [la Fundación] Quiéreme como Soy, Heart Care [Dominicana], el Voluntariado de Jesús con los Niños, el Oncológico Dominicano… o sea hay muchas necesidades en el país, pero ¿para qué leerlas solamente?, ¿para qué verlas por televisión? Únete a la causa y mira lo que está pasando porque tú puedes tener, aunque sea en lo más íntimo, una solución. Y ha pasado, hemos encontrado soluciones.
2. ¿De qué naturaleza es tu compromiso con estas causas? |
FC: Estoy en el comité [de Quiéreme como Soy]. También estuve en Caminantes por la Vida, estoy metido de lleno en el Voluntariado Jesús con los Niños, con el Oncológico con Heart Care, con todo y no es por darme un crédito de «mira yo estoy ahora mismo…». No, no, no… yo lo que quiero es que la gente se contagie, se contagie porque hemos tenido buenos resultados. Para no cansarte el cuento, con «Quiéreme como soy» los niños empiezan a decirme: «A mí no me quieren porque estoy gordo… porque yo soy gay, porque yo soy morenito, porque tengo lo’ moño’ malo», y se abrazan y lloran entre ellos y se perdonan; y tú comienzas a acabar hasta con el bullying sin habértelo propuesto porque tú lo que estás pidiendo es igualdad. La finalidad de la Fundación es igualdad. Ese es uno de los casos. Entonces, ¿para qué tú ir a cantar un día a beneficio de la fundación tal, y decir «yo estoy apoyando a fundación tal»… y después tú irte a sentar a tu casa a ver televisión?
3. ¿Cómo es tu «día a día»? Mirando un poco tu trayectoria parece que te retiraste de los escenarios, pero te quedaste en el teatro. ¿Por qué dejaste el canto? |
FC: En realidad no me salí, me sacaron. Verdaderamente fue por una litis -una litis legal-, con la disquera con la que había firmado en el 2003, que era la disquera de Baninter.1 Cuando empezaron a incautar –que nadie sabía lo que estaba pasando–, obvio que los artistas que estábamos ahí quedamos agarrados [en el proceso judicial al banco], entre ellos estaban Audrey Campos, la Banda Gorda, Sergio Vargas (Pavel [Núñez] había terminado su contrato, gracias a Dios), la Tribu del Sol –que también le había pasado lo mismo que a mí–, o sea… yo duré 11 años con una litis gubernamental, porque –como era un fallo hacia el Gobierno–, o sea era algo penal contra el Gobierno, todos los que estábamos ahí no podíamos grabar. Yo sí podía cantar. Pero grabar, no. Yo canté en conciertos, musicales, participé en Los Miserables… y muchísimos musicales más… pero grabar es el alma del artista y la forma de tú promocionarte. No, no podía… ni hacer películas, nada que fuera con mi imagen ni con mi voz. Entonces, en ese pleito duramos 11 años contra el Gobierno –pasaron dos gobiernos–, el de Hipólito [Mejía] y, luego, vino el de Leonel [Fernández] y entró el de Danilo [Medina] y ahí –hace tres años– fue que [terminó el proceso judicial].
4. Cuéntanos de esta producción musical. |
FC: Se llama «Llenarte de besos». La sacamos en el mes de abril. Gracias a Dios se ha vendido muchísimo, está sonado una nueva canción que se llama «Ay amor». Es una producción para mí soñada. Es mi «Bachata Rosa», yo estoy sumamente contento.
5. Háblanos de «Quiéreme como soy». |
FC: Gracias a la sociedad haber incluido –y de haber aceptado– la inclusión de cualquier persona, tuya mía y la de los niños especiales o cualquier persona con condición especial, tenemos más de 20 personas trabajando en empresas, entrenados por nosotros. Tenemos más de 100 solicitudes, el problema está en que las empresas no tienen el tiempo para capacitarlos.
6. ¿Lo que falta es quien la capacite en esa empresa?, ¿explícame eso? |
FC: Mira lo que pasa, nosotros conseguimos que la ley nos apoyara, nos dijeron que el 2% debe ser de inclusión en las empresas públicas y privadas del país, de hecho creo que las públicas son más. Ellos lo que hacen es que los capacitan hasta cierto punto; nosotros lo que estamos ahora es reuniendo dinero para capacitar, lo único que yo te tengo que dar a ti como empresa es una capacitación de la empresa, de lo que necesita la empresa para tú formalmente entrar ya al puesto y desde el primer mes para poder operar ya; nuestros niños no necesariamente están capacitados.
7. ¿Y la gente del vecindario… en sus barrios… cómo ayuda? |
FC: Es que llega no importa cómo lo hagan, nosotros nos enteramos de casos. En la temporada que trabajamos en la Fundación contra el cáncer Caminantes por la Vida, conocimos a una señora que decidió formar en su casa un grupito y ayudar de la nada y el barrio iba sabiéndolo. Las monjitas que, por ejemplo, que tienen la Casa Rosada para niños con Sida, las monjitas te dicen a ti: «nosotros comemos por el barrio, el barrio nos da la comida porque el barrio sabe lo que estamos haciendo». Y, aunque sea un plátano que te lleven, un plátano es mucho.
Por Farah Hallal y Betsabé Alcántara
1 El Banco Intercontinental, (también conocido como BANINTER) fue la segunda mayor entidad bancaria de capital privado en la República Dominicana hasta el momento de su colapso en el año 2003 y fue objeto del mayor fraude corporativo en la historia de República Dominicana. Su colapso fue una de las principales causas de la Crisis Financiera Dominicana del 2003.